Por Gustavo Ochoa Morán
El pasado 30 de mayo se estrenó el documental Arde Lima en varias salas de Lima. Bajo la dirección de Alberto Castro y con registros que datan del 2019, esta película intenta reflejar la historia más reciente de la escena drag limeña. Tras indagar realidades afines en sus documentales anteriores, Invasión Drag (2020) y Salir del clóset (2022), el director estrena una película que ostenta un tono celebratorio y muy urbano a la vez.
Fuimos a verla y te damos 5 razones para que te animes también.
1. Conocerás el significado detrás de la cultura drag.
Desde el inicio, el film nos lo deja claro: el drag es una expresión artística cuestionadora de los parámetros sociales y de los patrones culturales del género. Así lo señala también Tía Tula en parte del metraje: a diferencia del vedetismo, el drag performa para desafiar al status quo. De este modo, las diferentes historias personales que se irán mostrando en el documental te permitirán ver cómo cada una de ellas, con historias personales y realidades diversas, conciben y viven este arte. Entre las drag queens entrevistadas están Tany de la Riva, Stacy Malibú, Ernesto Pimentel, Cristina Corazón, GoDiva, Georgia Hart, y apariciones de La Langosta, Harmonika, Alezz Andro (drag king), entre otrxs.
2. Apreciarás de cerca el proceso creativo de lxs artistas.
“En esta ciudad, solo arrasas con tacones”, afirma tajante el lema en el afiche, pero esas armas estéticas requieren una esforzada preparación física, talento en diseño y construcción de la imagen, conocimientos sobre la cultura queer, entre otras habilidades. En varias de estas secuencias, se presencia de cerca el laborioso proceso de transformación a la vez que se derriban ciertos prejuicios sobre la cultura del drag, ya que en estas se perciben dominio escénico, constante innovación y profesionalismo.
3. (Re)conocerás espacios de socialización de la comunidad LTGBI+.
Adentrarse en la cultura drag es asistir a diferentes espacios alternativos, que van desde el teatro, las galerías de arte y, desde luego, ballrooms y espacios nocturnos. En la película, podrás apreciar cómo el drag llegó a las tablas de la mano de Ernesto Pimentel en Congreso (2017). Y verás, también, espacios de ocio habituales, como las discotecas Sagitario, La Cueva, Downtown e, incluso, algunas que cerraron tras la pandemia, como la célebre Legendaris. Sin embargo, los testimonios de las protagonistas cuentan, también, de los prejuicios y la plumofobia aún persistente en algunos hombres gays que asisten a los ambientes del drag.
4. Gozarás y reirás con el talento escénico del arte drag.
Si bien la película tiene por objetivo visibilizar el rechazo de cierto sector de la sociedad que aun enfrenta la comunidad artística drag, el tono que prevalece es el de la celebración. Por eso, el film muestra el arte drag con todo el brillo, la libertad y el desenfado con que se expresa en estos espacios que lo acogen, pues, como dice GoDiva en uno de los registros sobre la Casa Drag: “el drag es familia”.
5. Te llevarás en la memoria un poderoso videoclip de orgullo y ardor drag.
Arde Lima cierra con una secuencia musical cuyo tema fue compuesto, interpretado y producido para la película. Las trepidantes coreografías, sus escenas nocturnas y la mezcla con sonidos urbanos sirven como un epílogo a justa medida de lo que la película nos exhibe en su hora y media de metraje. El tema es pegajoso y si quieren pueden comprobarlo escuchándolo en YouTube.
BONUS. Si tienes suerte, podrás conocer a las protagonistas.
Algunas de las funciones están recibiendo la visita del director Alberto Castro y de algunas de lxs protagonistas del documental, así que es probable que al asistir te lleves la sorpresa de que se corten los trailers previos y las queens entren a sala a regalar afiches, sortear afiches gigantes firmados, tomarse fotos con lxs asistentes que deseen y llenar la sala con su mágica escarcha. Aprovechen esta semana para verla.